El Servicio de Urgencias del Hospital General Mateu Orfila ha incorporado el uso de óxido nitroso para evitar el dolor en determinados tratamientos de diagnóstico o terapéuticos en los casos de pacientes pediátricos. El procedimiento consiste en administrar dicho gas por la vía inhalatoria —por medio de una máscara facial— para que actúe como analgésico y sedante.
Los efectos del óxido nitroso son muy rápidos y hacen que el paciente se sienta más relajado en procesos que pueden resultar molestos o dolorosos —como suturas o punciones— y al mismo tiempo permiten a los profesionales del Servicio de Urgencias actuar de un modo más rápido y controlado. Esta técnica no provoca efectos secundarios para los pacientes —que están conscientes en todo momento— y solo requiere unos pocos minutos para que pasen sus efectos.